CuartoPoder / Verónica Torres Medrano
Morelia, Mich.-“Mujer escucha, está es tu lucha» se escuchó al iniciar. Tambores, garrafones, cubetas y panderos fue el ruido del hartazgo de cientos de mujeres que marcharon este día.
«Justicia, justicia, justicia» retumbó en la Antigua Calle Real, que pese al COVID-19, las mujeres gritaron hasta quedarse sin voz, en nombre de todas aquellas féminas que han sido asesinadas, aquellas que truncaron sus sueños, aquellas que hoy ya no están.
Los pañuelos morados y verdes se hicieron presentes, inclusive las mascotas marcharon.
Con lazos, las féminas midieron distancia. El gel antibacterial también fue el invitado.
Las pintas no se hicieron esperar, pese a la presencia de elementos de seguridad, no fue impedimentos para que los edificios que se ubican en el primer cuadro capitalino se pintara con diversos mensajes.
Encapuchadas y vestidas de negro, otras más de mezclilla, en short o vestido… TODAS gritaron y protestaron ante la situación que se vive en Morelia, en Michoacán, el país y el mundo.
Con martillos, los Grupos radicales quebraron los vidrios de varias casa habitación y negocios que se ubican sobre la avenida Francisco I. Madero Oriente.
«El que no brinque es mano» fue parte de las consignas.
Niñas, niños y hombres se unieron a la marcha que fue por Jessica, Gina, Araceli, Noemi, Rosario y todas aquellas mujeres que han sido asesinadas. Feminicidio es la palabra.
En el Templo de las Monjas ya esperaban los Provida, quienes con oraciones y gritando «Viva el Cristo Rey», se mantuvieron en los escalones de la iglesia. Mientras que los grupos de mujeres bricaron y gritaron a favor de que se legisle el aborto.
Sentadas o hinchadas, cada uno de los contingentes escuchó a las voceras, quienes nombraron a aquellas que hoy hacen falta.
Afuera de Palacio de Gobierno, las mujeres hicieron un performace. «Ni una más, ni una más, ni una asesinada más».
