Por: Ar Mendoza
Entre 1859 y 1863, el presidente Benito Juárez García decretó las denominadas Leyes de Reforma, un conjunto de decretos que tuvieron como objetivo consumar el proceso de separación de la iglesia y el Estado, así como la libertad de culto.
Morelia, una ciudad conservadora, nunca se ha separado totalmente de los intereses eclesiásticos de los políticos, sobre todo, cuando se trata de la manipulación de las masas a través de la religión.
Recién pasó la marcha del ocho de marzo, donde miles de mujeres abarrotaron el centro histórico de la capital michoacana, en exigencia de justicia, de derechos primordiales y de libre decisión sobre su cuerpo, cuando al edil moreliano, Alfonso Martínez Alcázar y a su cuerpo de asesores se les ocurrió invitar a uno de los mayores activistas próvida en Latinoamérica: Eduardo Verástegui.
El polémico actor y ahora activista por ‘la vida’, vino a la ciudad de la cantera rosa a presentar una película titulada ‘Sonido de libertad´ y a la firma de una carta para erradicar la explotación sexual infantil, para después rezar el rosario ante cientos de personas en la Catedral, pedir por los habitantes, el bien de sus familias y el Estado en general.
A varios colectivos feministas les causó conmoción la visita del actor mexicano, incluso a diferentes redacciones de medios de comunicación, llegó un desplegado en el que se denunciaba la ‘regresividad’ de las políticas públicas del gobierno municipal de Morelia, por sus posturas fundamentalistas y conservadoras que violaban los derechos humanos, así como una amenaza directa a la laicidad.
Eduardo Verástegui, también es presidente de la “Conferencia Política de Acción Conservadora” (CPAC) en México, donde miembros como Santiago Abascal, líder de la organización ultraconservadora española ‘Vox’, los senadores republicanos Ted Cruz y Mercy Schlap, dirigentes de la ‘Unión Conservadora Estadounidense’, Jair Bolsonaro ex presidente de Brasil y el propio Donald Trump, son miembros activos a nivel mundial.
Incluso el hijo de Jair Bolsonaro, destapó al actor mexicano como presidenciable por ser “guapo e inteligente”, dando paso a la formación de un partido político de derecha verdadera al no sentirse representados por el Partido Acción Nacional (PAN).
En política no existen las casualidades, sorprende el acercamiento del edil moreliano Alfonso Martínez Alcázar, con personajes de índole de la ‘ultraderecha’, además, se suma a la lectura ‘entrelíneas’ de trasfondos de actuación dignos de los gobiernos ‘fascistas’ del siglo pasado, como el proceder de la Policía de Morelia, con sus múltiples quejas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) o los dichos del Comisionado de Seguridad, Alejandro González Cussi, que ha comentado que los derechos humanos están desvirtuados.
Siendo hipotéticos, hasta podría ser que el slogan ‘Morelia Brilla’ fuera una referencia al himno falangista ‘De Cara al Sol, asociado con el dictador Francisco Franco en la España del siglo pasado.
