CuartoPoder Michoacán

Suspenden al “Padre Goyo”; oficiaba sacramentos a narcos

CuartoPoder / Liliana Jiménez

Morelia, Mich.-Gregorio López Jerónimo “El Padre Goyo”, polémico sacerdote católico de la región de Apatzingán, fue suspendido del ministerio sacerdotal de forma indefinida por la Diócesis de Apatzingán, por no seguir las leyes eclesiásticas al oficiar sacramentos a presuntos narcotraficantes.

La Diócesis de Apatzingán, encabezada por el obispo Cristóbal Ascencio García, informó la suspensión pero no ofreció mayores detalles, afirmando únicamente que el cese es por faltas graves a la administración de los sacramentos.

“El motivo de la suspensión del Padre Gregorio López Gerónimo es por las faltas repetitivas y graves dentro y fuera de la Diócesis en la administración de los sacramentos, faltas graves que han ocasionado serio problemas en la comunidad eclesial y que también han sido faltas a la dignidad de los sacramentos”, se lee en un comunicado firmado por el obispo Cristóbal Ascencio.

Sin embargo, fuentes consultadas al interior de la Arquidiócesis de Morelia -a la que pertenece Apatzingán-, revelaron que el “Padre Goyo” fue sorprendido en diversas ocasiones administrando sacramentos a miembros del crimen organizado y sus familiares, sin seguir las normas litúrgicas establecidas por la Iglesia Católica.

Incluso, el nombre del “Padre Goyo” ha salido en diversas reuniones de la Mesa de Seguridad para la Paz en Michoacán, órgano en el que participan corporaciones militares, policiales y de inteligencia federales y estatales, como un personaje cercano a miembros del crimen organizado en los municipios de Buenavista, Apatzingán y Tepalcatepec.

Cabe mencionar que otros sacerdotes de la Diócesis de Apatzingán han recibido amenazas recientes, por parte de miembros del crimen organizado, por negarse a cometer actos en contra de su ministerio sacerdotal.

“El Padre Goyo” salió a la luz pública en el marco del levantamiento de los Grupos de Autodefensa, siempre ligado a personajes que tras ese fenómeno han sido vinculados con el crimen organizado, como José Manuel Míreles Valverde -quién se ostentaba como fundador de los comunitarios- y otros ex líderes que ahora encabezan el cártel de La Nueva Familia Michoacana y  sus grupos armados denominados como Los Viagras y Los Blancos de Troya.