CuartoPoder / Antonio García García
En el interior de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJ) existe un centro de tortura utilizado por la Policía Ministerial para obtener declaraciones a modo de la fiscalía y extorsionar a familiares de las víctimas.
Selene Vázquez Alatorre, presidenta de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas, reveló que lo anterior ha quedado al descubierto por las denuncias de víctimas de la Policía Ministerial.
La funcionaria detalló que el 40 por ciento de las 300 denuncias que existen en CEEAV, por violación a los derechos humanos, corresponden a actos de tortura, sin embargo, la mayoría de éstos apuntan a la PGJ.
“Los desnudan, los montan encima del bloque de madera, les detienen manos y piernas, mientras reciben toques eléctricos en los genitales, burlas, golpes en la cabeza, les ponen bolsas de plástico para provocar asfixia, les aplican agua salada o mineral por la nariz”, refirió.